La Constitución correísta de 2008, otra traba para solucionar la crisis energética

La Carta Magna crea la categoría de “sectores estratégicos”, que deben estar en manos del Estado

Rafael Correa y Alberto Acosta fueron los promotores de la Constitución de 2008 / Foto: cortesía

Quito- En estos días de severos apagones, que han llegado hasta las 15 horas, expertos del sector energético, empresarios y políticos señalan que la inversión del sector privado puede poner fin, en el mediano plazo, a la crisis energética. Durante el correísmo, el Gobierno destinó los recursos de los altos precios del petróleo y de créditos chinos a la construcción de varias hidroeléctricas que fueron edificadas con fallas, pero que están operativas.  

Tras agotar el cupo de crédito y con los problemas fiscales, el país se quedó sin dinero para invertir en más generación eléctrica y dar mantenimiento al parque termoeléctrico. Sin plata del Estado, se señala que la inversión privada puede ser la solución.  

Pero, al menos por ahora, esa posibilidad luce lejana. Si bien se ha intentado con leyes, como la de Eficiencia Energética de Daniel Noboa, hay un candado que impide la participación privada en el sector eléctrico: la Constitución de 2008, elaborada durante el Gobierno de Rafael Correa.

La Constitución de la República de Ecuador de 2008 establece en su artículo 313 que el Estado tiene la potestad de administrar, regular, controlar y gestionar los sectores estratégicos del país. Estos sectores se consideran fundamentales para el desarrollo nacional y, por lo tanto, su gestión debe realizarse bajo principios de sostenibilidad ambiental, precaución, prevención y eficiencia.   

“Para pensar durante los apagones: la Constitución, que duraría 300 años y nos llevaría al paraíso, la misma que prohibió participación-inversión privada en sector eléctrico”, señaló la analista económica, Gabriela Calderón.  

“Basta ya de seguir amarrados a un sistema energético caduco! La Ley Energética está hundiendo al país al mantener a la inversión privada alejada del sector.  Este desastre es el precio que pagamos todos los ecuatorianos. Es hora de abrirse a nuevas oportunidades”, aseguró Mónica Heller, presidenta de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), en su cuenta de X.  

“La Constitución de Montecristi: un error histórico... Ahora vivimos con una camisa de fuerza que impone un modelo que los ciudadanos no compartimos y que frena el desarrollo”, dijo Alberto Acosta Burneo, analista económico, en su cuenta de X.